El Sistema de Falanges
EL SISTEMA DE FALANGES
Un puente sencillo y natural
entre un timbre natural y ancestral
y nuestra exigente musicalidad actual.
“Debemos retomar y profundizar el proyecto moderno de experimentación autónoma, a fin de que su poder renovador no se seque”.
HABERMAS
Sugiere hallar otras vías de inserción de la cultura
especializada en la praxis diaria para que ésta
no se empobrezca en la repetición de tradiciones”
NESTOR GARCÍA CANCLINI
Introducción.
Aunque la fuerza e inercia de la modernidad y la tecnología, igual que en una estampida salvaje, nos condiciona y ubica en posiciones que solo atienden sus llamados, sabemos que es posible encontrar nuevos espacios y horizontes donde transitar y construir.
Aparentemente nuestra música actual es suficiente y cumple eficientemente su papel artístico, cultural y social en correspondencia con las demás líneas del conocimiento y su aplicación, pero constantemente nuestra sensibilidad se percata de cómo se trunca su ímpetu espiritual al caer en los vacíos que aun existen en cada uno de los componentes musicales.
Quienes hemos nacido y aprendido la música desde muy temprana edad, al calor de los arraigos culturales y fuera de la sistematización, pero hecho el estudio formal posteriormente; cuando asumimos el acto musical, debemos asistir dentro de nosotros al encuentro titánico de estas dos vertientes y su lucha por imponerse. Acto musical en el que no tenemos más alternativa que conciliarlas y quizá entonces la oportunidad de identificar mejor sus fortalezas y debilidades para desprejuiciarse artísticamente y obtener un resultado conforme a nuestra nueva idiosincrasia y su desarrollo que nunca se detiene.
En estos encuentros de culturas y sensibilidades se hacen más evidentes los vacíos de tales componentes de la música, ambiente en el que nace el Sistema de Falanges.
Antecedentes
A través de la historia, todas las culturas han ejercido la música en diversos usos, formas, niveles y estilos y para ello han creado sistemas, métodos, técnicas, instrumentos y varias divisiones del espectro sonoro.
La cultura occidental, hoy la más difundida, ha desarrollado su propia música con características muy particulares entre las que se destacan:
1. La división de la octava (división física o natural) en doce partes iguales llamadas medios tonos.
2. Dos tipos de caracterizaciones tonales básicas, llamadas tonalidad mayor y tonalidad menor.
3. Un ordenamiento básico de siete sonidos que constituye el concepto de tonalidad.
4. Una tabla de siete valores de tiempo para indicar la duración de los sonidos junto a otras para agruparlos rítmicamente.
5. Varias tablas de valores relacionadas con las demás cualidades del sonido, estilos y formas interpretativas.
En la sistematización de la música occidental existe el campo de la organología (instrumentos musicales) la cual tiene la siguiente gran división:
1. Instrumentos de Viento.
2. Instrumentos de Cuerda.
3. Instrumentos de Percusión.
El Sistema de Falanges aplica en los instrumentos de viento, particularmente dentro de las flautas y las cañas.
El Sistema de Falanges nace dentro de la búsqueda por lograr darle a nuestros instrumentos de viento autóctonos colombianos y latinoamericanos (Flautas, gaitas, zampoñas, rondadores, pinquillos, tarcas entre otros) la capacidad de competir sinfónica, melódica y armónicamente con los instrumentos occidentales convencionales. En los instrumentos autóctonos solo es posible conseguir (con posiciones completas) las escalas diatónicas y donde los cromatismos de la escala dodecafónica son desafinados, inseguros y limitados. Se sabe que este mismo problema tuvo la música occidental antes de crearse el Sistema Boeehn o Sistema de Llaves desarrollado precisamente para permitir la ejecución de escalas y pasajes cromáticos además del acceso a todas las tonalidades en un mismo instrumento. Funcionalmente el Sistema de Falanges es análogo al sistema Boeehn.
Aunque muchos de los conceptos con que se presenta el Sistema de Falanges están conforme al sistema musical occidental, su aplicación no es exclusiva de la música occidental, pues dado que las bases del Sistema son eminentemente naturales, puede aplicarse a cualquier instrumento en cualquier tipo de música en el mundo.
Descripción.
El Sistema de Falanges consiste en un nuevo orden y trato particular asignado a las falanges de los dedos de las manos y a una nueva distribución de una serie de orificios organizados musical y ergonómicamente sobre un instrumento musical, correspondientes mutuamente y determinantes de una nueva forma física de tales instrumentos musicales, de otra manera de conseguir los sonidos y todo el producto artístico musical, además, de una nueva técnica de ejecución para el sistema y los instrumentos.
El sistema se define por el uso independiente de las falanges de los dedos de las manos, de tal manera que cada falange (proximal, media o distal) cierre o abra un orificio del tubo instrumento musical y así lograr un mayor alcance, en número, de sonidos o notas musicales.
El sistema es aplicado a los instrumentos de viento que físicamente son un tubo cilíndrico con orificios que producen, cada uno, un sonido (nota o tono) diferente hasta completar la escala cromática (doce sonidos a intervalos de medio tono) u otro tipo de escala, mas algunos suplidos según el instrumento en que se aplique.
La distribución de los orificios-sonidos o notas se hace de acuerdo a las posibilidades tonales que se pretendan como a las ergonómicas, según el instrumento en que se incorpore el sistema, lo cual varía en correspondencia con el tipo de boquilla, embocadura, tamaño, escala musical, cultura etc.
El sistema se desenvuelve con estricto apego ergonómico de tal manera que no haya ninguna exigencia anatómica forzosa, pues antes que las manos se subordinen al sistema, éste y su diseño se supeditan a la posición y forma natural de las manos.
Para la música occidental en particular el sistema asigna un orificio para cada nota, con lo que permite la ejecución exacta e independiente de cada una de las notas de la escala cromática (12 notas) facilitando el acceso a todo tipo de escalas y tonalidades puras o aleatorias, directa e inmediatamente como también a todos los efectos y ornamentos musicales.
El sistema es aplicable a una gran variedad de instrumentos musicales como la flauta, bien sea Quena, Traversa o Dulce, la Gaita costeña, (Costa Atlántica) el Oboe, el Clarinete entre otros.
Como es lógico y propio en toda nueva idea, estas nacen y requieren de tiempos indeterminados para desarrollarse, según el alcance y pertinencia particular de sus propiedades respecto a la coyuntura del desarrollo universal. En tal sentido, se infiere que las posibilidades aplicativas de las ideas germinales del sistema son muy amplias en cualquier campo de la ingeniería y que el desarrollo del sistema recién avanza por el campo donde nació y sus primeras aplicaciones como son las Flautas y las Gaitas.
Las flautas y las gaitas bajo el sistema de falanges, para la escala cromática occidental de doce sonidos, poseen trece (13) orificios, doce (12) en la parte superior para los dedos opuestos al pulgar y uno (1) en la parte inferior para el pulgar de la mano izquierda, los cuales tienen asignada, cada uno, una nota de la escala cromática o dodecafónica (doce sonidos) con algunos suplidos que se usan como en la mayoría de los instrumentos melódicos para un mejor fraseo, ornamentación y continuidad tímbrica y melódica.
Como el número de orificios es mayor al número de dedos, se aplica lo que le da el nombre al sistema, los dedos más hábiles, índice y medio, actúan sobre dos orificios cada uno, un orificio con la falange media y otro con la falange distal, cubriendo así la totalidad de los trece orificios del instrumento.
Potencialidades del sistema:
Pedagógica.- Las ventajas pedagógicas se pueden considerar de dos clases: Didácticas porque facilitan la enseñanza y Constructoras porque inciden directamente en el desarrollo estructural y funcional del estudiante y su sistema nervioso.
Didácticas
COMODIDAD.- Es un instrumento relativamente pequeño, que se puede guardar y llevar en el maletín, junto a todos los demás útiles escolares.
ERGONOMÍA.- La flautas o gaitas bajo el Sistema de Falanges son totalmente ergonómicas, técnicamente no exige ningún tipo de esfuerzo en la postura de las manos ni en la embocadura, pues, su diseño es hecho de tal forma que la disposición de las notas-orificios sobre el instrumento se amolda a las manos y los dedos, antes que las manos y los dedos tengan que acomodarse sobre el instrumento. Igual ocurre con la boquilla para la embocadura.
VERSATILIDAD TIMBRICA.- La flauta bajo el Sistema de Falanges puede ser todo tipo de flauta, Dulce, Traversa y Quena, o puede ser Gaita u Oboe, lo cual es un atractivo tímbrico y funcional muy importante para la motivación del estudiante.
ECONOMÍA.- Los instrumentos son supremamente económicos, más si se comparan con el precio que ellos mismos tienen bajo el Sistema Boeehm. El precio cómodo se constituye en la mejor estrategia pedagógica, que facilita la masificación, requisito ineludible para el aprendizaje de la música, que requiere que cada quien tenga su propio instrumento para la práctica suficiente y necesaria prevención sanitaria.
Es diez y más veces más económico y cómodo que otros instrumentos con igual capacidad, lo cual facilita el acceso y manejo masivo de los instrumentos y la música en una coyuntura social-universal donde las artes se muestran como el mejor camino que el ser humano ha de recorrer rumbo a su sensibilización, aspecto fundamental para la erradicación de los principales males que aquejan el mundo actual.
Constructoras
PERCEPCIÓN UNIVOCA.- El desarrollo de la música en los instrumentos bajo el Sistema de Falanges, se efectúa de manera unívoca, en cuanto a la percepción de todos los sistemas sensoriales que intervienen en el hecho musical (oído, vista, tacto), lo cual facilita una mejor conjugación perceptiva y asimilación en el sistema central del cerebro para el manejo de todos los componentes de la música, con sus líneas de pensamiento, sistematización y aplicación independientes, dirigidas a un todo integrado, el producto musical.
La ejecución del instrumento, se percibe a través de los sentidos, siempre, cada uno, en una sola línea lógica, que se corresponde con las demás líneas lógicas de los otros sentidos (táctil, visual y auditivo), de tal manera que la percepción, el aprendizaje y conceptualización independiente a partir de cada uno de los sentidos, no riñe con lo del otro, facilitando así el aprendizaje unívoco a través de todos los fenómenos intelectuales y sensoriales (aprendizaje desde el análisis, síntesis, analogía complementariedad, globalización, tacto, vista oído etc.), donde intervienen el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo junto a la sensibilidad y la fisiología.
Esto posibilita la asimilación unívoca de nuestro sistema central por medio de los estímulos que se perciben por las diferentes vías y todo se traduce en la mejor y más sencilla asimilación conceptual y técnica a través de las vías sensoriales y las operaciones mentales en forma independiente o en conjunto.
Esta cualidad tiene mucho valor pedagógico porque facilita la actividad emuladora del cerebro, toda vez que las percepciones conjugan mejor en la medida de una mayor correspondencia en las analogías, con lo cual se descarga la atención, que puede ampliar su cobertura y alcanzar mayor número de líneas de pensamiento que para este caso van dirigidas a enriquecer la acción musical. Estas ventajas facilitan el aprendizaje con menos elementos cognitivos y menos sistematización como es el caso de los niños en los que el desarrollo fisiológico (desarrollo físico, funcional y sensorial) es mayor que el psicológico (pensamiento y conocimiento).
DESARROLLO PSICOMOTOR A TRAVES DEL USO INDEPENDIENTE DE LAS FALANGES.- El uso independiente de las falanges provoca mayor ejercicio para mayor desarrollo estructural y funcional del sistema nervioso. El uso independiente de la falange es el movimiento más especializado de la mano, que por lo tanto, exige, así mismo, mayor especialización cerebral central y periférica que concluye en una mayor disposición, formación y conectividad sináptica.
El sistema adopta la falange como unidad de movimiento psicofísica, que es una sección del dedo, la unidad más pequeña usada hasta ahora. Esto constituye un paso adelante en el desarrollo evolutivo al exigir y ejercitar movimientos musculares y caminos sinápticos más finos para las manos (órgano manipulador) y el cerebro (órgano rector) respectivamente. Ejercicio que potencializa estos dos órganos tan importantes en el ser humano.
Siendo que la sinapsis, la conectividad y la mayor disposición neuronal, son factores primordiales en la composición cerebral y la inteligencia, entonces, el uso del sistema de falanges propicia un ejercicio eminentemente constructivo intelectualmente. Entre mayor ejercicio e intervención de los componentes de la mano, mayor exigencia funcional que conlleva a mayor exigencia sináptica en el cerebro y todo el sistema nervioso, consistente en un mejor y mayor uso y disposición del potencial sináptico y neuronal, el cual es muy superior y flexible durante la etapa del desarrollo respecto a la edad adulta; todo, para que en consecuencia haya mayor capacidad intelectual y pueda ser usada en todos los procesos perceptivos, cognitivos y actitudinales de cualquier rol o actividad humana.
Sabemos que la mano es junto al lenguaje, uno de los dos grandes constructores de la inteligencia humana, debido a su uso como herramienta natural primaria en las múltiples actividades del hombre, pues tal aplicación obliga al cerebro a destinar a la mano una inmensa cantidad de conexiones sinápticas que se amplifican en los dedos, la última extensión más versátil del cuerpo humano, en cuanto a movimiento se refiere, los cuales son los verdaderos responsables de la multiplicidad sináptica.
La cultura humana y todo su desarrollo tecnológico, ha asumido, hasta ahora, al dedo como la unidad de movimiento física más pequeña, pero, el Sistema de Falanges, da un paso adelante, en cuanto a técnica aplicada en el movimiento humano y asume como unidad de movimiento más pequeña a la falange, esto amplifica sustancialmente el abanico de la conectividad sináptica y automáticamente las posibilidades intelectuales del cerebro.
DISPOSICIÓN TECNICA DE LAS NOTAS.- La disposición técnica de las notas en un orden totalmente lógico, lineal, secuencial, permite la canalización cerebral en el mismo sentido y facilita tales procesos del pensamiento en los demás campos del conocimiento, funciones y procesos del intelecto.
Cultural.- El sistema interviene instrumentos que tienen raíces profundas en la identidad cultural de nuestros pueblos, lo que recogerá y generará infinidad de posiciones que seguramente habrán de cuestionar, comulgar, controvertir, dinamizar y propiciar nuevas posiciones conceptuales y actitudinales a favor de nuestra cultura camino al desarrollo.
El sistema de falanges cualifica los instrumentos tradicionales autóctonos de viento como las flautas y las gaitas ubicándolas al mismo nivel musical de cualquier instrumento sinfónico y melódico convencional y profesional occidental bajo el sistema Boeehm, como clarinetes, saxos, oboes y flautas etc. Lo cual permite el acceso a un timbre eminentemente melódico y empoderado culturalmente, al cuerpo o espectro sonoro de cualquiera de los ensambles instrumentales utilizados en nuestro país, igual que a cualquier género musical del mundo.
Con el Sistema de Falanges se puede cualificar nuestro folclor y garantizar una importante ganancia cultural incluyendo el manejo y desarrollo de algunos elementos propios muy arraigados en nuestra cultura. Tiene la capacidad de ofrecer, con nuestros instrumentos autóctonos, idénticos resultados musicales y artísticos que los instrumentos occidentales comunes en el mercado musical. En los instrumentos bajo el Sistema de Falanges es posible ejecutar cualquier cromatismo y melodías en todas las tonalidades, igual que todos los efectos y figuras ornamentales convencionales.
Artística.- Reivindica un timbre natural, sencillo y ancestral al situarlo a tono con las actuales exigencias musicales de una forma igualmente sencilla, natural y ancestral.
Técnica.- Uno de los soportes estratégicos de la técnica para la ejecución musical consiste en el manejo adecuado del potencial humano individual respecto a la velocidad y el movimiento. Relación dinámica donde la atención, tanto en la diversificación como en la focalización, debidamente dosificadas, son muy importantes para un producto sonoro sincronizado y artísticamente equilibrado entre lo individual y grupal.
En tal sentido el Sistema de Falanges por su diseño ergonómico y estricto apego a lo natural en todos los aspectos, permite el despliegue total del potencial humano para una excelente aplicación técnica que redunda en un elevado producto artístico.
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